Pensando En Nuestros Hijos
No temamos al momento de educar y disciplinar a nuestros hijos, incluso el mundo nos lo agradecerá después. Serán hombres y mujeres temerosos de Dios, respetuosos de Su palabra, y hacedores del bien. Serán responsables no solamente en sus estudios, sino también en sus profesiones y en los hogares que ellos formarán. Serán buenos ejemplos no solo para la sociedad, sino también para sus hijos y nietos.